Antiguamente, las esperanzas de hallar agua estaban puestas en nuestro satélite natural, la Luna. Hoy sabemos que allí se encuentran pequeñas cantidades de agua en forma de hielo en el interior de algunos de sus cráteres.
El 31 de Julio de 2008, la NASA anunció oficialmente que había comprobado la existencia de agua en Marte, a través de la sonda Phoenix. Investigaciones recientes también acreditan la presencia de una reducida cantidad de vapor de agua en la atmósfera marciana. Asimismo, se intenta averiguar si en el interior de Marte hay verdaderos océanos de agua líquida.
Sin embargo, la mayor cantidad de agua presente en Marte no se encuentra en estado líquido, sino que aparece congelada en los polos. Se han hallado evidencias de que, en un pasado remoto, el ahora frío planeta marciano dispuso de algunos ríos y lagos, con una cantidad bastante importante de agua líquida.
Por lo que se sabe hasta el momento, en el resto de los planetas y en los demás cuerpos que se desplazan alrededor del Sol, el agua parece ser bastante escasa. Por ejemplo, en uno de los polos y en algunos de los cráteres de Mercurio, parecen haber algunas formaciones constituidas por hielo. De hecho, hubo naves espaciales no tripuladas que visitaron el planeta Venus y lograron comprobar la existencia de vapor de agua en las nubes de su densa atmósfera. También parece haber vapor de agua en las atmósferas de Júpiter, Saturno y Urano. Además, se ha conseguido divisar agua en forma de hielo en los cometas y en algunos satélites. Los científicos creen que es muy probable que, más allá del sistema solar, haya muchos planetas con abundancia de agua.
Como se puede observar en un planisferio, la Tierra posee una cantidad de agua relativamente importante: los océanos y los mares cubren dos tercios de su superficie.
DISTRIBUCIÓN DEL AGUA EN EL PLANETA TIERRA
Frid, D. (2015). Ciencias Naturales 1. Boulogne: Puerto de Palos, pp.48-49.
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